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Ingredientes

para 50 rosquillas de anís

1 kg. de harina
1 vaso de anís seco (250 ml.)
1 vaso y medio de aceite de girasol (375 ml.)
1 vaso de azúcar blanco (250 gr.)

①Introducir en un bol 375 ml. de aceite de girasol, 250 gr. de azúcar, 250 ml. de anís seco y 1/2 kilo de harina. Debes amasar poco a poco e ir añadiendo harina hasta que veas que la masa es uniforme, tiene que ser consistente pero no debe de estar dura.

②Una vez conseguida la textura de la masa correcta, coger un poco de esta masa y estirarla deslizando la mano sobre ella y haciéndola rodar sobre la encimera de la cocina. Debe tener un grosor suficiente para no queden como poquita cosa, pero esto ya es al gusto de cada persona.

④Ir haciendo rosquillas de anís y cada una que esté lista, la embadurnas de azúcar del plato preparado, sólo por un lado y la dejas sobre la bandeja justo por el otro lado, por el que no tiene azúcar. Repetir esto hasta que tengas la bandeja llena y de manera que quede cierta distancia entre cada rosquilla y no se toquen entre ellas.

⑤Una vez el horno ya ha cogido la temperatura, introducir la bandeja, siempre con mucha atención para no quemarte y dejarla a una altura media. Hornearlas durante unos 10 minutos hasta que las veas ya doraditas.

⑥Mientras se cumple el tiempo hacer más rosquillas e ir dejándolas preparadas sobre un trozo de papel vegetal dispuesto en la encimera. Llegado el tiempo o cuando ya estén hechas, ayudarse de una manopla para no lastimarse y sacar la bandeja con las rosquillas de anís.

⑦Dejar esta bandeja con cuidado en algún sitio plano e ir colocando justo al lado de ella las rosquillas sobre papel de cocina y separadas entre sí. Gracias a esto le quitamos en posible exceso de aceite que pueda tener después de pasar por el horno.

⑧Ahora poner el papel vegetal, con más rosquillas preparadas, sobre la bandeja del horno y meterla de nuevo para hornear las siguientes. Al igual que antes debes ir controlandolas y preparando ya las últimas para hacer.

 

⑨Hornear de la misma manera que antes y repartir toda la operación por una tercera vez. Si aún te sobran rosquillas podrás hacer una cuarta hornada para terminarlas, claro.

⑩Cuando estén todas dispuestas sobre la encimera y a medida que se vayan enfriando, las puedes ir pasando a un plato para servirlas o degustarlas.

¡ BON PROFIT !